Comenzó su edificación a finales de 1545, año de la fundación del pueblo, quedando terminada hacia 1549, por orden y disposición de don Rodrigo de Puxmarín y Soto, Caballero del hábito de Santiago y Regidor de Murcia, Señor y fundador del Mayorazgo y Señorío de La Raya de Santiago.
Inicialmente fue puesta bajo la advocación de Nuestra Señora de la Encarnación (aparecen otras denominaciones similares en textos antiguos, como Parroquia de la Asunción y también de la Anunciación). La primitiva iglesia constaba de una nave central con tejado a dos aguas y torre-campanario adosada; asimismo tenía anexa una casa parroquial.
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RETABLO ALTAR MAYOR |
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CÚPULA CRUCERO |
En la fachada posterior, lindante con el Camino Real de Andalucía, fue colocada una lápida de piedra con el siguiente texto: Este lugar pobló Rodrigo de Puxmarín y Soto, Caballero de la Orden de Santiago y Regidor de Murcia, y doña Catalina de Guzmán, su mujer. Año de 1545”.
La iglesia permaneció abierta al culto todos los días y de ella dependieron otras parroquias cercanas, como la de Puebla de Soto y la ermita de El Palomar, llegando a tener el curato rayero hasta cinco sacerdotes.
A lo largo de todo el siglo XVIII se realizaron algunas reformas de importancia: coro, sacristía, capillas y camarines para diversas imágenes así como el enlosado del altar y pedestal del presbiterio. Tenía cuatro capillas con panteón donde se inhumaba a muchos rayeros destacados (los Hernández, los Avilés, los Botías, los Carrillo, los García, los Riquelme, etc.) y las capillas eran: la de San Antonio de Padua, Nuestra Señora del Rosario, Nuestra Señora de los Remedios y Nuestra Señora de los Dolores. También existían dos panteones internos, para enterramientos, denominados de primer y segundo arco.
En la torre-campanario se instalaron tres campanas. La mayor o Santa María, en 1786; la “mediana” en 1841 y la “pequeña” en 1888. En el último tercio del siglo XIX el templo presentaba serios desperfectos hasta el extremo de provocar el desprendimiento de una cornisa interior que causó heridas mortales a un feligrés, en el año 1884.
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ALTAR PURÍSIMA |
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ALTAR NAZARENO |
La iglesia fue declarada oficialmente en estado de ruina en 1894.
En 1896 por parte de la Junta Diocesana se licitó el proyecto de obras para la reconstrucción del templo, comenzando las obras en 1897 dándose éstas por terminadas a finales de 1898. Se derribó la nave central, menos la torre, que por su solidez y excelente estado se conservó, desmontando la cubierta o ábside y elevándola en altura para adecuarla a las nuevas dimensiones de la nave central o fábrica.
El nuevo templo se alzó en planta de cruz latina con tres capillas de paso a cada lado y dos colaterales junto al presbiterio, reconstruyéndose el retablo, original del siglo XVIII. Se enlosó con mármol blanco y gris de Macael (Almería), ampliándose también la sacristía y la casa parroquial; en la torre se colocaron lugares las tres campanas en sus respectivos lugares; igualmente las imágenes históricas se colocaron en sus capillas y camarines correspondientes.
La inauguración de la nueva iglesia se celebró con gran solemnidad entre los días 24 a 27 de marzo de 1899, coincidiendo con la festividad de La Encarnación.
Durante los turbulentos años de la guerra civil (1936-1939) se pedieron algunas imágenes, tapices y ornamentos, salvándose afortunadamente las tallas históricas. Las propias autoridades culturales de la República enviaron al Museo Provincial de Murcia algunas tallas valiosas, como la de la Patrona, Nuestra Señora de la Encarnación. Otros valiosos efectos y documentos, como los Libros del Archivo Histórico parroquial, fueron conservados por particulares, retornando luego a la iglesia tras la contienda.
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RETABLO S. ANTONIO (ACTUAL SAGRADO CORAZÓN) |
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ALTAR DOLOROSA |
Desde 1899 hasta nuestros días, el templo ha sido sometido a algunas reformas estructurales y de conservación; entre 1939 y 1942 se realizaron obras de limpieza y reparación por los desperfectos causados durante la guerra.
A principios de los 70 (siglo XX) se abordó una seria reforma de la estructura, al haber cedido los cimientos del ala sur, provocados por la filtraciones de agua de una vieja aljibe del patio, reforzando con nueva cimentación los arbotantes, así como la colocación de unas gruesas correderas de hierro desde la fachada principal a la posterior para asegurar los arcos del crucero. Se pintó el interior de la iglesia y en 1987 se estucó la fachada con china blanca y rosácea.
En los primeros años del siglo XXI se ha restaurado totalmente la cubierta o tejado, precisando también algunas otras reformas que se intentan llevar a cabo, recabando para ello la generosa aportación del pueblo. Durante los años 2010 a 2013 se ha llevado a cabo una rehabilitación integral del interior del templo con la colaboración del pueblo.